lunes, 11 de enero de 2016

China girl

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La alerta sonó bajita pero contundente a un costado de mi cabeza. Volteé y miré la pantalla en la penumbra. La una de la mañana,  era raro, nunca suena nada  después de las diez...

Bowie había muerto.

Primero la sorpresa, luego el juego de fechas, diciembre ha quedado atrás...No, no es broma.

Se me encoge el corazón, ¿Pero cómo? Ese cabrón es eterno... 

Leo la noticia y poco a poco siento algo que se encoge dentro de mi.

Te imagino enterándote, veo tu cara de incredulidad y luego tu dolor...

Cierro los ojos y todos mis pensamientos giran en torno a ti y a él, yo, tu, nosotros...

Abro los ojos y despierto de un sueño profundo. Te soñé y lo soñé a él y a ella. Los cuatro éramos tremendamente felices, pero tambien sabíamos que solo era un breve momento, un breve sueño... Todo parecía eterno... 

La sensación regresa. La melancolía avanza lentamente pero sin tregua.

Esa tristeza, como cuando después de meses me di cuenta que no ibas a regresar, cuando de pronto me di cuenta que estaba tremenda, total y absolutamente  solo... Solo en un mar de gente. Perdido sin ti, huérfano en la muchedumbre.

¿Qué causa ese desasosiego por tu muerte? 

-¿Quieres saber la mala noticia?
-- ¿Qué?
Contestas entre enfadada y somnolienta.

-Bowie se murió.

--No juegues con eso.

Refunfuñas entre ofendida e incrédula te volteas y continuas haciendo lo que recién inicias.

Avanzo en el tráfico de la mañana. Prendo la radio, suena una canción, es de él por supuesto. La locutora comienza a hablar y solo escucho salvajadas sin sentido, desafortunadamente para mi, esta mañana la chica que habla solo me parece imbécil y banal.

El día es estúpidamente hermoso, quiero que esté nublado, quiero que esté lluvioso, quiero que sea un día malo, muy malo, peor que ayer y antier y anteantier... Pero el día es estúpidamente hermoso... Azul, soleado y sin nubes.

Te veo  de nuevo... Ya te has enterado, lo veo en tus ojos, lo veo en tu cara descompuesta, veo tu tristeza, ¡Carajo! Tu si lo entiendes, se fue, nos dejó, se fue y no se atrevió a avisarnos, al menos para que no nos cogiera como pendejos esperando poder verlo algún día.

Te abrazo, te consuelo y lloramos...


A lo lejos suena el eterno ring tone de tu celular, china girl...

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