miércoles, 13 de julio de 2016

Fluctuación



Él.

Te acercas a ella, y no logro si no darme cuenta de que me siento asqueado de ti... Derechas, izquierdas, derechas, izquierdas. Sin un rumbo definido. No eres ni eso ni lo otro. Eres todo y nada. Me asqueo de ti completamente.


Sin embargo continuas caminando y mi sangre se hiela. Me espasmo, me detengo, me ralentizo, veo todo el cuadro en tercera persona y mi garganta sofoca un grito roto.

Tu.

Recoges tu cabello con la mano, lo pones tras la oreja, esperas un instante y luego vuelves a la batalla con tu torbellino amarillo natural. El cabello liso e impermeable hace lo demás, el truco del enredo se ha desenredado.

Coges un croché y lo atoras con un manojo de pelo extra. Tu bulto amarillo infinito ha perdido la batalla temporalmente.

Yo.

Tu oreja descubierta me entretiene, me pierdo y divago, caigo entre sus pliegues, desemboco en ellos y me pierdo sin ninguna posibilidad... Mee enfoco en la cámara lenta la comisura de tus labios tersos y rosados...


Hace frío, hace calor, estoy paralizado, asqueado y decidido, quizá más uno que el otro sin un orden concreto.


Camino hacia ti y todo se desvanece...Fluctúo.

Pronta entrega...

Recordando tu expresión,
vuelvo a desear,
esas noches de calor
llenas de ansiedad...

Sofocado por el sueño y la presión,
busco un cuerpo para amar...

La distancia va perdiendo su espesor.
Pronta entrega por favor...


Me puedo estimular con música y alcohol...
Pero me excito más cuando es con vos...

Siento todo irreal...